Los datos son contundentes, en tres años la ciudad tiene casi 100 mil personas más en condición de indigencia que no llegan a cubrir sus necesidades alimentarias básicas y por ende experimentan todo tipo de privaciones en materia de salud, hábitat y educación. Dado que el crecimiento vegetativo de la ciudad es casi nulo en ese periodo, debemos asumir que este aumento de la indigencia y la pobreza en la CABA se explica por efecto de las políticas recesivas tanto del gobierno nacional, como por la falta de políticas pro cíclicas (anti crisis) por parte del gobierno de la jurisdicción más rica del país.